«La información es la mejor vacuna que protege al consumidor»
Angel Luis Monge. Director General de Consumo
Desde su puesto de director general de Consumo, Ángel Luis Monge se considera preocupado por las mismas cosas que cualquier ciudadano. Destaca de la legislatura que ahora concluye la nueva Ley para la Defensa y Protección de los Consumidores en Aragón. De asociaciones como FEACCU-Huesca destaca su capacidad para informar y para gestionar quejas y reclamaciones.
Pregunta.- ¿Cuáles son las cuestiones que más le preocupan como director general de Consumo y cuáles ve usted que preocupan a los ciudadanos como consumidores?
Respuesta.- Las preocupaciones del director general coinciden plenamente con las expresadas por los ciudadanos aragoneses. Tenemos muy claro que la información es la mejor vacuna que protege al consumidor, y especialmente en los temas que más le afectan, como son la telefonía, la vivienda o los contratos bancarios.
P.- ¿Estamos los aragoneses concienciados sobre nuestros derechos y obligaciones como consumidores?
R.- Esta legislatura ha sido especialmente provechosa para los consumidores aragoneses y su concienciación como tales. La nueva Ley para la Defensa y Protección de los Consumidores en Aragón ha dotado a los aragoneses de un instrumento jurídico óptimo para la mejor defensa de sus derechos.
El movimiento asociativo y la red pública de oficinas de información al consumidor son dos elementos importantísimos para la difusión y la consolidación de los derechos de los aragoneses como consumidores.
Esta ley, publicada en el BOA a finales del pasado mes de diciembre, supone la plasmación legal del mandato constitucional del artículo 51. Viene a ser una respuesta a la necesidad de protección al consumidor. Se trata de dotarle de un plus de protección, frente al empresario y protegerle para el libre ejercicio de los derechos.
Los objetivos de la ley son establecer procedimientos eficaces para la defensa de los consumidores y usuarios; disponer el marco adecuado para favorecer el movimiento asociativo de consumo, y declarar los principios, criterios, obligaciones y derechos que configuran la defensa de los consumidores y usuarios y que habrán de ser tenidos en cuenta por los poderes públicos en las actuaciones y desarrollos normativos futuros.
P. ¿Podría explicarnos con más detalles qué supone esta nueva ley para los consumidores y usuarios aragoneses?
R.- La oportunidad de la iniciativa, el amplio consenso político y social que ha logrado y la regulación de aspectos inéditos hasta hoy, muchos de ellos relacionados con el desarrollo e implantación generalizada de nuevas tecnologías, hacen de este texto legal un instrumento muy eficaz ante los retos y los riesgos que ofrece la actual sociedad de consumo.
Rompe el corsé con el que el paso del tiempo ahoga poco a poco a todas las normas legales. No sólo contempla las últimas novedades en la formulación de las relaciones comerciales, tanto desde el punto de vista técnico como contractual, sino que manifiesta su clara preocupación por los derechos de carácter esencial, como la salud, y por la protección de aquellos colectivos sociales que pueden resultar más vulnerables.
Tiene algunas aportaciones de gran interés, como la figura de la restitución en paralelo. Por otra parte, la consolidación de los mecanismos de participación ciudadana, se completa con las posibilidades de coordinación en las funciones de control e inspección que se ofrece a la Administración local.
P.- ¿Cómo ve la actividad de asociaciones de consumidores como FEACCU Huesca?
R.- El papel desempeñado por FEACCU-Huesca ayuda a dotar a los ciudadanos oscenses de un mecanismo no sólo informador sino también gestor de sus quejas y reclamaciones en materia de consumo. Animo a FEACCU-Huesca a continuar en esta línea de trabajo, que redunda en beneficio de toda la sociedad oscense.
